Financieras
enero 30, 2024
3 minutos de lectura
La independencia es anhelada por muchos, pero realmente se piensa muy poco sobre lo que implica cumplir este objetivo, tanto en una casa propia como en un inmueble rentado. Dentro de esta conversación viene a nosotros el concepto del ahorro, mismo que dentro de la cultura popular ha adquirido concepciones erróneas.
Ahora mismo, vale la pena preguntarse, ¿cuáles son esas concepciones?
Estas se refieren a las compras de impulso o bienes que no aportan algún beneficio tangible a corto, mediano o largo plazo, como lo puede ser un smartphone, la prenda de moda o un auto de agencia, que se deprecia a partir de su salida de la concesionaria.
Opinión del experto
Pero, ¿de dónde parte el problema? .
De acuerdo con la opinión de Gerardo Mendizábal, director comercial de HIR Casa, actualmente la sociedad, cultura y familia nos ha enseñado a gastar y no a ahorrar, ya que el dinero adquirido, ya sea por necesidad o por pasatiempos recreativos en cuanto se recibe, el primer pensamiento que viene a la mente es: “¿cómo lo voy a gastar?” Cuando debería evolucionar hacia “Lo voy a guardar para cumplir mis objetivos” o crecerlo con una compra que genere un rendimiento a través del tiempo, como lo puede ser un bien inmueble.
Es importante reflexionar que todas estas decisiones que hacemos diariamente influyen para en el futuro tener la oportunidad de alcanzar las metas a donde queremos llegar, por ejemplo, si te sientes preparado para adquirir un bien inmueble, es vital identificar los siguientes puntos:
1. Ubicación: Me debo preguntar si la zona donde deseo adquirir mi propiedad es conveniente y cómo va a evolucionar la plusvalía.
2. Tamaño: Estoy considerando la formación de una familia o deseo que mi hogar esté constituido por mi pareja y yo o vivir de forma independiente.
3. Precio: Es indispensable identificar mis posibilidades tanto actuales como a futuro, ¿conseguiré un mejor trabajo?, ¿tendré más dinero? O mantengo un presupuesto conservador.
4. Gastos fijos: Cuáles son mis gastos actualmente, tanto importantes como superficiales y cómo puedo prescindir de los que no tienen relevancia o me impiden cumplir mis objetivos.
5. Gastos variables: Qué gastos puedo tener en el presente o futuro que probablemente no están del todo bajo mi control, pero hay altas posibilidades de que sucedan.
¿Qué puedes hacer al respecto?
La solución es más sencilla de lo que aparenta ser, una adecuada educación financiera y un plan de acción ante las situaciones que puedes enfrentar son clave para cumplir tus objetivos, mismo que puede nacer desde empezar pequeñas acciones orientadas hacia las cosas que realmente necesitas o necesitarás y no solo a algo que decides por presión o impulso.
Adquiere tu patrimonio a través del ahorro
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